“Bienvenidos a la Institución Santa Rita de Casia. Inspirados por su vida de amor inquebrantable, perdón heroico y entrega misericordiosa, caminamos juntos en el camino agustiniano, alimentados por el diálogo, la paz y la caridad. Que este espacio virtual sea un refugio de luz para quienes buscan consuelo, ayuda en causas difíciles y fortalecer su fe. Santa Rita, abogada de lo imposible, ruega por nosotros.”
El amor hacia los demas nos ayuda a mejorar como prsonas y nos sirve para, tener una mejor convivencia.
Fortalecer la fe cristiana y el conocimiento de Dios desde la vivencia del Evangelio.
Enseñar los principios de la doctrina católica y su aplicación en la vida diaria.
Fomentar valores como el amor, la paz, la humildad, el perdón y la solidaridad.
Desarrollar una conciencia moral y espiritual crítica basada en el ejemplo de Jesús.
Promover la participación activa en celebraciones litúrgicas y comunitarias.
La Iglesia Católica, con origen en el siglo I a partir de las enseñanzas de Jesús y la labor de sus apóstoles, se consolidó como institución en el siglo IV al convertirse en la religión oficial del Imperio Romano. Su historia es rica en eventos y transformaciones, desde la expansión inicial hasta la Edad Media.
Orígenes y Expansión:
Margherita (en español, Margarita) nació el 22 de mayo en la aldea de Roccaporena, a 5 km al oeste del pueblo de Cascia. Nació de padres mayores. A pesar de que deseaba ser monja, cuando tenía 14 años de edad, sus padres la casaron con un hombre del pueblo llamado Pablo Mancini. Tuvieron dos hijos mellizos: Jacobo y Paolo.
Un día, Mancini que trabajaba como sereno en la aldea de Roccaporena y tenía muchos enemigos por sus fechorías pasadas fue emboscado y asesinado. Una vez viuda, aunque aliviada, ya que había logrado que Pablo muriera en paz, Rita pidió la admisión al monasterio de las agustinas de Santa María Magdalena, en Cascia (establecido en 1256). Sin embargo, no fue aceptada debido a que solo se permitía el ingreso de vírgenes.
Un año más tarde, en 1417, también murieron sus dos hijos púberes. Fallecieron al mismo tiempo, de muerte natural. Ya sin obligaciones familiares, Rita fue aceptada en el convento, recibió los hábitos de monja y, más tarde, realizó su profesión de fe. Tenía 36 años.
En el convento, Rita se entregó a una vida de oración y penitencia
En la Iglesia Católica, el mes de mayo es dedicado a María, Madre de Jesús. Su ejemplo enseña sobre la fe, obediencia, humildad y sobretodo, cómo amar.
El Papa Francisco explicó de manera concreta el papel de los jóvenes en la Iglesia y su importancia: "Los jóvenes nos hablan y nos interpelan, nos hacen caer en la cuenta de las luces y sombras de nuestra comunidad, y con su entusiasmo nos animan a dar respuestas acordes a nuestro tiempo".
La participación de los jóvenes en la iglesia es crucial para su vitalidad y crecimiento futuro. Los jóvenes aportan nuevas perspectivas, energía y entusiasmo, y son esenciales para la continuidad de la fe a través de las generaciones. Además, sirven como puente entre la iglesia y la comunidad, llevando el mensaje de esperanza y transformando la sociedad.
Para ser mejores personas y agradar a Dios en la Tierra, se recomienda enfocarse en el desarrollo espiritual, social y familiar, a través de la oración, la lectura de las escrituras, la práctica de la gratitud, el servicio a los demás y el cumplimiento de los mandamientos. Además, es importante conocer la propia identidad en Cristo y vivir de acuerdo con ella, buscando la felicidad y la rectitud.
Los Mandamientos mas importantes son:2
Los mandamientos que nos dejó Jesús se pueden resumir en dos: amar a Dios con todo el corazón, alma y mente, y amar al prójimo como a uno mismo. Estos mandamientos resumen la ley y los profetas. También, Jesús dio un "mandamiento nuevo": que sus seguidores se amen unos a otros como él los ha amado.
La misa ofrece a los estudiantes una oportunidad para la reflexión espiritual, el fortalecimiento de la fe y la conexión con la comunidad, elementos que pueden ser beneficiosos para su crecimiento personal y académico.
Las misas son importantes para los estudiantes, ya que ofrecen un espacio para la reflexión espiritual, la conexión con la fe y la comunidad, además de fortalecer los valores y la ética. La asistencia a misa puede ayudar a los estudiantes a encontrar un propósito más profundo, a desarrollar un sentido de pertenencia y a crecer en su relación con Dios y con los demás.
Creer en Jesus desde pequeños y hecer Oración Nos Ayuda a establecer una relación con Jesús para toda la vida, proporciona un espacio seguro para aprender y crecer en la fe, y capacita a los niños para vivir los valores cristianos
Jesús murió en la cruz como un acto de sacrificio para expiar los pecados de la humanidad y reconciliar a los seres humanos con Dios. Su muerte, según la doctrina cristiana, es un acto de amor y redención, ofreciendo la posibilidad de perdón y salvación a quienes creen en él.
Al reflexionar sobre la entrega de Jesús en la cruz, se nos invita a considerar el profundo amor de Dios y la importancia de la negación propia en el seguimiento de Cristo. La cruz simboliza sacrificio, arrepentimiento y la búsqueda de una vida transformada por la fe
La entrega de Jesús en la cruz es la máxima expresión del amor de Dios por la humanidad, un sacrificio para el perdón de los pecados.
Jesús resucitó de entre los muertos Y nos dice"Vayan por todo el mundo y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos", proviene de Mateo 28:19, donde Jesús da a sus discípulos la Gran Comisión. En este pasaje, Jesús instruye a sus seguidores a ir por todo el mundo, hacer discípulos de todas las naciones, bautizarlos y enseñarles a obedecer sus mandamientos.
En resumen, la frase "Dejad que los niños vengan a mí" es una invitación a acoger la inocencia y la sencillez infantil en el ámbito espiritual, y un rechazo a cualquier tipo de barrera que impida su acceso a la fe.
Jesús nos invita a seguirlo y a convertirnos en sus discípulos, llevando una vida de amor, servicio y obediencia a Dios. Nos invita a la reconciliación con Dios y con los demás, al perdón, a la paz y a la esperanza. También nos llama a ser instrumentos de su amor y gracia en el mundo, compartiendo su mensaje y ayudando a otros.